El Gobierno chileno rechazó el emplazamiento del presidente Evo Morales en el foro de la ONU con el argumento de que los tratados no se tocan y se cumplen, como lo que establece el de 1904.
13 puntos están en la agenda acordada entre Bolivia y Chile, que está paralizada por no haber avances en el problema marítimo.
El Gobierno chileno una vez más puso de manifiesto “la debilidad histórica y jurídica de sus argumentos”, al rechazar el emplazamiento de Bolivia para solucionar definitivamente nuestro enclaustramiento, afirmó ayer el presidente en ejercicio Álvaro García Linera.
“De entrada, hemos rechazado de manera vehemente el discurso agresivo y violento de parte del Gobierno chileno, es inaceptable, injustificable. Pero lo que hace esa violencia discursiva es mostrar la debilidad jurídica y la debilidad histórica de sus argumentos”, remarcó.
En una conferencia de prensa desde el Palacio de Gobierno, García Linera manifestó que “frente a la agresión del discurso nuestra respuesta es la justeza de nuestra razón histórica, la justeza de nuestros argumentos jurídicos, que son los que van a triunfar tarde o temprano, ojalá más pronto que tarde”.
Durante su intervención en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el miércoles, el presidente del Estado, Evo Morales, dijo que Chile no puede “prolongar en el tiempo el encierro geográfico impuesto por la fuerza”, y propuso modificar el Tratado de 1904.
El canciller de Chile, Alberto Moreno, manifestó en la ONU que “no existen temas de límites pendientes entre Bolivia y Chile”, mientras que el Presidente de ese país advirtió en Santiago que “Chile va a defender con toda la fuerza del mundo nuestro territorio, nuestro mar, nuestro cielo y nuestra soberanía”, y que los Tratados se respetan.
Nacimos con mar
“Bolivia nació con mar, una guerra injusta y abusiva nos quitó el mar, un convenio firmado a punta de bala y de amenaza de nueva invasión el año 1904 viabilizó esa expropiación de nuestro territorio patrio, pero está claro que el tema sigue pendiente y seguirá pendiente”, apuntó García Linera.
“En pleno siglo XXI, un país moderno, civilizado, que busca buenas relaciones con los vecinos, está obligado a cambiar de actitud, no se pueden mantener actitudes decimonónicas, es decir del siglo IX, basadas en la violencia, la intimidación, la amenaza y la agresión para convivir entre países hermanos. Bolivia reafirma el derecho histórico e irrenunciable, y siempre hemos convocado y seguiremos convocando a salidas justas y negociadas sobre esta temática”.
Subrayó la hermandad con el pueblo chileno, “a quien respetamos y queremos mucho, pero rechazamos esta actitud agresiva, violenta y abusiva por parte del Gobierno de Santiago, que no lleva a ninguna solución”.
Bolivia en todos los foros internacionales demanda la solución del problema marítimo, y el vecino país rehúye tanto la negociación bilateral como multilateral.
DATOS
• No hay relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978.
• Bolivia hizo conocer el 23 de marzo de 2011 su intención de acudir a los tribunales internacionales para denunciar el incumplimiento del Tratado de 1904.
• Diremar, la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima, trabaja en la elaboración de la demanda. Sin embargo, oficialmente no se conoce la fecha en la que será presentada.