domingo, 2 de agosto de 2015

Ministro de la Presidencia de Bolivia: La derecha de EE.UU. financia a cívicos conspiradores


DIARIO CAMBIO, LA PAZ.- Las violentas movilizaciones que el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) protagonizó en la ciudad de La Paz exigiendo sus demandas y la ruptura del diálogo con el Gobierno, develó el interés político de una oposición con respaldo internacional, según el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en un contacto con el cadena internacional rusa RT.

RT: ¿Cómo está la situación de Bolivia? ¿Hay una activa amenaza de golpe de Estado?

Juan Ramón Quintana J.R.Q.: En los últimos nueve años de gobierno hemos estado enfrentando atentados, estrategias del socavamiento de la estabilidad del gobierno y ahora nos toca enfrentar esta arremetida de la derecha, a través de Comcipo que con el pretexto de demandas cívicas ciudadanas ha lanzado de manera voraz, agresiva, violenta contra el gobierno, cuando sabemos que detrás de estas demandas hay un proyecto de federalismo radical. Por lo tanto es una nueva arremetida de la derecha criolla, apoyada y financiada por la derecha internacional, particularmente -no nos resulta nada desconocido, y no somos ingenuos- de la derecha Norteamericana.
 
De alguna manera, lo que no han cambiado son los actores. El 2006 fueron actores de la ultra derecha boliviana y hoy la marcha del comité. No se ha modificado el carácter conspirativo, son los mismos actores y hay un vínculo muy fuerte entre los cívicos que postulan el federalismo radical, aunque su petición es desarrollo regional. Se ha puesto en evidencia el apoyo de políticos que fugaron del país y que hoy están en el exterior, como Mánfred Reyes Villa o Mario Cossío que está refugiado en el Paraguay o Branco Marincovick que está refugiado en Brasil. Es un arco de apoyo político extranjero, pero a su vez estos políticos fugados están acogidos por fuerzas ultraconservadoras en Estados Unidos, Brasil y otros países que permanentemente facilitan acciones de desestabilización.

RT.: ¿Cree que existe algún vínculo entre lo que sucede en Bolivia y el proceso de desestabilización en comparación de otros países de la región que atraviesan la misma situación?

J.R.Q.: Históricamente América Latina ha sido efecto de un continuo asedio del imperio norteamericano. Estados Unidos quiere una América Latina sumisa, con gobernantes lacayos, con empresas transnacionales. Estados Unidos lo que quiere es tener control sobre las fuerzas de seguridad, quiere imponer una política de sumisión domesticamiento de impacto político militar, porque eso fortalece su poderío y además le ayuda a resolver su crisis interna.
 
América Latina es un factor de ajuste a la crisis económica que tiene Estados Unidos y es obvio, porque América Latina se está convirtiendo en una plataforma de correlación de fuerzas internacionales como nunca antes había ocurrido. La presencia de China, Rusia e Irán es importante, por lo tanto Estados Unidos está perdiendo terreno y ante la pérdida de terreno, de dominio y hegemonía política y económica en América Latina, no le queda otra que echar un zarpazo criminal a estos proyectos de emancipación. 

RT.: ¿Cómo pueden protegerse los países de estos ataques?

J.R.Q.: Una de las maneras  para contener estos ataques externos contra la estabilidad, el crecimiento económico y la autonomía es radicalizar, es crispar las fuerzas políticas en cada uno de nuestros países es enfrentar desde las bases movilizando a las organizaciones sociales, dado que en Bolivia las organizaciones sociales son el gobierno mismo.

Lo que tenemos que hacer es generar mayor conciencia una mayor politización  y por lo tanto una respuesta más rápida a este tipo de ataques en cuanto a la defensa de los procesos, pero para América Latina necesitamos la irradiación de estos proyectos de liberación  y eso supone la unidad de América Latina.  

Tomado de: http://www.consuladodebolivia.com.ar/

No hay comentarios:

Publicar un comentario