viernes, 29 de mayo de 2015

Fiscalía denuncia que jueces de La Paz y Sucre recibieron miles de dólares para favorecer a peruano

Por Sergio Mendoza, Página Siete, La Paz.- El Ministerio Público señaló ayer al abogado Jorge  Valda y a Yuliano Arista, más conocido como el Curaca Blanco, de haber participado en la entrega de sobornos de hasta 80.000 dólares a distintas autoridades del Órgano Judicial, de la Comisión Nacional del Refugiado en Bolivia (Conare) y de la Dirección de Migración, para favorecer a Martín Belaunde.

“Arista iba al Desaguadero para recibir dinero y entregarlo al abogado Valda, con lo que después se cancelaba a autoridades judiciales para obtener beneficios a favor de Belaunde. Se sabe que Valda hacía varias transferencias con estos fines”, reveló ayer el fiscal Anghelo Saravia, uno de los que integra la comisión que investiga la fuga del empresario peruano.

En audiencias de medidas cautelares, el abogado del Ministerio de Gobierno sostuvo: “Seguro la defensa preguntará  a quiénes estaban destinados los sobornos, pues fueron a los vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, a funcionarios de Migración, del Conare y además a los policías que custodiaban a Belaunde. Hablamos de sumas de hasta 80.000 dólares”.

De acuerdo con las imputaciones contra Arista, Valda y otras personas, el primero declaró que Valda, abogado de Belaunde, recibía sumas  “exorbitantes” de entre 20.000 y 80.000 dólares para “pagar a vocales de la ciudad de Sucre y jueces de la ciudad de La Paz, quienes le habrían favorecido en su resolución judicial”.

La Fiscalía expuso además que se entregó  un vehículo en una empresa de Rent a Car para obtener un préstamo de 58.000 dólares, que debía entregarse como coimas a funcionarios públicos.

Pero, además, el 21 de mayo Arista viajó a Puno para recoger 80.000 dólares, con los que Valda debía sobornar a un vocal del Tribunal Supremo de Justicia, quien retrocedió a poco de concretarse el acuerdo, por lo que Arista dijo: “Éstos son unos maricones de (…)  y ahora vamos a hacer el plan B de extracción”, según la Fiscalía.

Por esos hechos, la Fiscalía imputó a Valda y a Arista por cohecho activo y favorecimiento a la evasión, este último relacionado con la fuga de Belaunde.

Alberto Morales, abogado de Valda, afirmó,  con referencia a los supuestos sobornos, que tales acusaciones no pueden hacerse con base sólo en una declaración.

“Arista nos dijo que a él prácticamente le presentaron su declaración para que  la firmara en la Policía y que si no lo hacía, su hija iría presa. Nos dijo que en cuanto él pudiera, haría una aclaración, pues no era verdad lo que allí se decía, lo torturaron y lo presionaron”, informó.

Efectivamente, en una audiencia Arista sostuvo que él jamás había declarado de forma voluntaria esas cosas y que lo torturaron y lo amedrentaron psicológicamente para inculparse e inculpar a otros con  amenazas.

“Quiero decir que se inventaron todo esto que está en la imputación. Yo no declaré esto, a mí me hacen decir cosas que no dije. Me amenazaron que arrestarían a mi hija y a mí me trataron como a un gran delincuente”, afirmó.

Envían a la cárcel a Yuliano Arista

Un juez de Instrucción Cautelar decidió ayer enviar al penal de San Pedro con detención preventiva a Yuliano Arista, quien alojó en su domicilio al peruano Martín Belaunde los últimos meses, imputado por cohecho activo y favorecimiento a la evasión.

Asimismo, otorgó detención domiciliaria a los coimputados Paolo D. y Gabriel G., procesados por el último delito  mencionado.

El juez consideró que no se comprobó que Arista tuviera una vivienda –pese a que alojó a Belaunde en una de ellas-, tampoco que tuviera trabajo lícito ni familia, por lo que podría darse a la fuga. 

Además, no se comprobó que los coimputados tuvieran un trabajo lícito y una vivienda, aunque sí familia.

Los tres imputados coincidieron al declarar que el sábado 23 de mayo se encontraron en una parrillada a las 16:00 en la ciudad de Santa Cruz. Ahí, Arista conoció a Gabriel, cuñado de su sobrino Paolo, quien llegó a fines de abril a Bolivia desde Argentina y en compañía de familiares.

Fuente: http://www.consuladodebolivia.com.ar/