El Gobierno prevé para mayo la firma de un acuerdo
con una empresa francesa para concretar la compra de 16 radares, con
los objetivos de dar seguridad aérea y garantizar el tráfico, afirmó
ayer el ministro de Defensa, Reymi Ferreira.
La
autoridad gubernamental aclaró que no se tiene una cifra de cuánto
costará la implementación de estos equipos en el país. Este mes se
informó que el presupuesto para esta adquisición llega a cerca de $us 15
millones.
“El tráfico aéreo civil ha aumentado en
Bolivia porque el país está en el corazón del continente.
Necesitamos
dar garantía a las aeronaves que pasan por el espacio nacional y que
pagan por ello. En este momento contamos con un sistema precario de
radares, la verdad es que tenemos funcionando uno solo y en un
aeropuerto, lo que significa un grave riesgo para la aeronavegación”,
advirtió el Ministro de Defensa.
Explicó que se
contarán con radares primarios, que servirán para el uso militar, y
secundarios, destinado a vuelos civiles. Ferreira aclaró que éste es el
único plan de defensa “seguro” que lleva adelante el Gobierno, en cuanto
a la compra de equipos.
Además, Ferreira indicó que
estos radares también servirán para la detección de vuelos ilegales para
el transporte de cocaína o contrabando. En este caso, expresó que tras
el funcionamiento de estos equipos también se dará curso a la ejecución
de la ley de derribo de aviones que está vigente desde el año pasado.
El 22 de abril de 2014, el presidente Evo Morales promulgó la Ley de
Seguridad y Defensa del Espacio Aéreo, norma que autoriza el derribo de
aeronaves declaradas “hostiles” o que incumplan disposiciones del
Comando de Seguridad y Defensa del Espacio Aéreo, repartición que tiene
su sede en la ciudad de Santa Cruz. El citado comando está al mando del
general de la Fuerza Aérea Ángel Arteaga.