"Es una política de Estado que después de la nacionalización, primero los bolivianos tengan gas. Antes recordarán que (ex presidentes) querían llevar gas al exterior sin tomar en cuenta al pueblo boliviano", remarcó en un acto público en el que se firmó un contrato para la construcción de una estación de regasificación en Riberalta.
El documento fue firmado entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y la empresa Copetrol.
El Primer Mandatario remarcó que ese acuerdo tiene el objetivo de dotar gas domiciliario a ciudades intermedias, entre ellas, San Ignacio de Moxos, Trinidad, Santa Ana de Yacuma, Rurrenabaque, San Borja y Guayaramerín.
"El Gobierno no llega con prebendas, regalos, sino con obras en beneficio para Riberalta y los siete municipios del departamento de Beni", subrayó.
Puntualizó que con la nacionalización de los recursos naturales la mayoría de las ciudades tienen gas domiciliario, aunque insistió que el objetivo es llegar a todas las poblaciones del país.
"Pedimos la participación de autoridades locales para acelerar la instalación de gas a domicilio en la ciudad de Riberalta", complementó.
El Jefe de Estado explicó que una vez concluidos los trabajos en los siete municipios del departamento amazónico del Beni, hasta diciembre de este año, se ampliará la dotación de gas domiciliario a otras poblaciones.
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