"Chile agradece enormemente toda la solidaridad expresada por el gobierno de Bolivia, por el presidente (Evo) Morales, respecto a esta situación tan dramática que han vivido tantos chilenos y tantos extranjeros" radicados en las zonas afectadas por el temporal, sostuvo el cónsul general de Chile en La Paz, Milenko Skoknic.
"El gobierno de Chile ha hecho saber a todos los gobiernos que, por el momento, no requeríamos de ningún implemento particular, ningún despacho de ayuda porque esperemos tener estos elementos en Chile como para poder llegar a las familias, a los albergues, a los afectados", agregó.
Las declaraciones del diplomático chileno se registraron luego que el gobierno del presidente Morales afirmara que Bolivia se encontraba a la espera de la respuesta de su par de Chile para llevar ayuda humanitaria a la región del Atacama, castigada por los aguaceros que dejaron al menos 13 muertos, 19 desaparecidos y un millar de damnificados.
"Estamos a la espera que el gobierno (de la presidente Michelle Bachelet) nos confirme qué se necesita en la zona" castigada por el temporal que anegó las ciudades de Calama, Antofagasta y Coquimbo entre otras menores, afirmó el mandatario.
Skoknic dijo que, de todas formas, su gobierno evaluaba la pertinencia de la ayuda internacional.
"Estamos aguardando en terreno si se requiere otro tipo de ayuda internacional", reseñó al asegurar que La Moneda tiene consideración por el gesto de Bolivia.
"No ha habido de ningún gobierno ningún envío (de ayuda humanitaria a Chile); no queremos que parezca que le estamos diciendo que "no" a Bolivia. Por el momento no creemos necesario", significó.
Al tiempo de manifestar la solidaridad boliviana con el pueblo de Chile, Morales dijo que "es nuestra obligación, de pueblo a pueblo, ayudar a los hermanos que sufren las calamidades que trae el cambio climático".
Por primera vez en décadas la zona desértica del Atacama recibió tan copiosos aguaceros.
Un turbión anegó a mitad de semana los centros más densamente poblados del centro norte de Chile y echó a perder los sistemas de agua potable.
Por vía de la Cancillería de La Paz, Bolivia había expresado la víspera su solidaridad con el gobierno y pueblo chileno y se dijo presto a ayudar en la medida de sus posibilidades.
"Nosotros compartimos lo poco que tenemos y lo hacemos con convicción de pueblos hermanos", añadió el jefe de Estado boliviano.
El diplomático chileno acotó que su gobierno intenta, más bien, asistir a los trabajadores en situación de extranjería, principalmente en el distrito antofagastino del Chañaral.
"Lo más importante ahora es poder llegar con nuestra colaboración a los ciudadanos bolivianos que están afectados (por el turbión). Estamos con (la viceministra) Leonor Arauco, que ella está coordinando dentro de la cancillería (boliviana)" esta gestión, enfatizó.
Bolivia y Chile carecen de relaciones diplomáticas desde 1976, a causa del diferendo marítimo que desde 2013 los emplazó como litigantes en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
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