El jefe de la diplomacia boliviana recibió el saludo protocolar de los embajadores acreditados en el país y resaltó los mecanismos de integración de la región.
El canciller del Estado, David Choquehuanca, afirmó ayer que el ingreso de Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur) refleja la firme convicción del Gobierno de buscar alternativas para superar el enclaustramiento marítimo que le fue impuesto por fuerzas chilenas.
El ingreso al Mercosur “es una decisión política que refleja nuestra firme convicción de buscar alternativas viables y favorables para superar los límites que nos encierra en nuestra condición de enclaustramiento injusto”, afirmó Choquehuanca durante su discurso en el saludo protocolar de fin de año del Cuerpo Diplomático acreditado en el país.
Bolivia perdió en 1879, en la llamada Guerra del Pacífico, 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio, sobre los que el Tratado de 1904 fijó la soberanía chilena.
Chile sostiene que todos los asuntos fronterizos con Bolivia se resolvieron con la firma de ese documento y descarta los foros internacionales como escenario para debatir un asunto que considera estrictamente bilateral.
En cambio, con el argumento de que fue impuesto y no se cumple, el Gobierno de Evo Morales ha insistido en que el acuerdo se debe revisar, posición ratificada hoy por la ministra Dávila, que aseguró además que es un tratado “injusto” para su país.
Bolivia y Chile no tienen relaciones a nivel de embajadores desde 1962, salvo un paréntesis entre 1975 y 1978.
El acercamiento que habían tenido ambos países durante la presidencia de la chilena Michelle Bachelet acabó cuando Morales anunció, en 2011, que iba a llevar su demanda marítima a tribunales y organismos internacionales.
Choquehuanca, quien en reiteradas ocasiones ratificó la voluntad del Gobierno boliviano de encontrar un acuerdo con las autoridades chilenas, manifestó que aceptar la invitación de los países miembros del Mercosur para ser socio pleno del bloque consistirá en un proceso de complementariedad y no de competitividad.
Destacó la privilegiada ubicación geográfica de Bolivia en Sudamérica, lo que permitirá vencer asimetrías existentes y abrir la posibilidad para el país de convertirse en un eje articulador de la hermandad regional, un factor de equilibrio geopolítico entre el Pacífico y el Atlántico.
Los diplomáticos
A su vez, el decano del cuerpo diplomático, el Nuncio Apostólico monseñor Giambattista Diaquatro, en representación de los embajadores, manifestó que este tipo de encuentros permite expresar el sentir de las delegaciones diplomáticas “por el buen papel y el reconocimiento universal del cual goza Bolivia en la familia internacional, además del aprecio por su desarrollo, que le permite mirar al futuro con confianza y esperanza” para todos sus habitantes.
Asimismo, expresó “su admiración” por la preparación, dedicación, prudencia, compromiso y dinamismo que tiene el Ministro de Relaciones Exteriores boliviano.