Los recursos se destinarán a la fase de siembra, dotación de maquinaria y elaboración de productos derivados, en el marco de la seguridad alimentaria y de apoyo a los pequeños y medianos productores.
La agencia de Cooperación Internacional de Corea (Koica) proyecta invertir en Bolivia cinco millones de dólares para el desarrollo de un programa integral, que incrementará la producción de quinua con el objetivo de obtener productos con valor agregado.
El proyecto, que está en su fase final de aprobación por el Gobierno surcoreano, será implementado entre 2013 y 2016, informaron el embajador de Corea en Bolivia, Young Wook Chun, y el representante residente de Koica, Rafael Chung.
El plan incluye la provisión de maquinaria para las fases productivas, así como la capacitación de los agricultores y la elaboración de productos derivados del denominado grano de oro andino.
“Actualmente se está gestionando, junto con el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, la implementación del proyecto integral de mecanización de la quinua en siembra y cosecha en el altiplano sur de Bolivia”, afirmó Chung.
En el marco del año internacional de la quinua, que se celebrará en 2013, el Gobierno boliviano y la Embajada de Corea tienen el afán de contribuir en la mejora de la productividad y la comercialización de derivados del grano.
Se desarrollará un proyecto integral que abarca desde la fase de siembra de la quinua hasta la elaboración de productos derivados, que mejorará la economía de los productores.
Estos procesos pueden implementarse a partir de experiencias, como la creación de un centro de investigación similar al que existe en Salinas de Garci Mendoza, en el departamento de Oruro.
El Embajador explicó que los expertos identificaron que las condiciones climáticas no son buenas, cuyo factor puede ser resuelto con la capacitación a los productores y la introducción de moderna tecnología para la siembra y cosecha del producto.
Para esto, Corea propone mejorar los sistemas de riego y promover la conservación de suelos, que en algunos casos se encuentran erosionados, además de trabajar con semilla certificada e implementar maquinaria adecuada para la región.
En cuanto a riego, las propuestas pasan por el uso de camiones cisternas, implementación de microaspersión y el uso de cintas portables de agua en los surcos de los sembradíos.
El concepto de la siembra de la quinua pasa por un desarrollo integral que engloba la repoblación de ganado camélido, cuya presencia aportará abono orgánico para la fertilización de los terrenos.
Respecto de la tecnología en la producción de quinua, Young Wook Chun explicó que se proyecta la introducción de sembradoras grandes en las planicies y tipo manual en las laderas, así como el uso de cosechadoras, trilladoras y equipos para transformar e industrializar el producto.
Estos elementos, sumados a la rotación de suelos, permitirán a los productores tener mejores niveles de rendimiento, ya que impulsarán la producción intensiva de la quinua.
En el campo de la comercialización, el plan es difundir las bondades nutritivas que posee la quinua tanto en el ámbito nacional como mundial.
También se hará énfasis en la transformación del producto primario en artículos como hojuelas de quinua, barras energéticas, pastas de fideo, pudines y otro tipo de derivados alimenticios.
El representante de Koica recordó que a en el mundo existe una gran demanda de alimentos con alto valor nutritivo como el caso de la quinua, producto que en la actualidad se consume en los países asiáticos, europeos y americanos.
La quinua se produce en el altiplano sur de Bolivia, en Oruro, Potosí, donde se hallan los salares de Uyuni y Coipasa, en cuyos alrededores germina la quinua real, que es una especie única en el mundo.
El cultivo de este producto comenzó a expandirse a una parte del altiplano de La Paz por la demanda creciente en el mercado.
El requerimiento progresivo del alimento condujo a que el nivel de producción en Bolivia se incremente en 311% entre los años 2004 y 2010.
El Embajador también dijo que un grupo de 14 técnicos en el área de seguridad y soberanía alimentaria, junto con productores de quinua, se capacitó en Corea.