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Política
El dirigente de la CPESC Néstor Villca denunció que ex dirigentes de la Cidob, encabezados por Adolfo Chávez, no dejaron ni una máquina para redactar cartas.
LA PAZ - Cambio
El nuevo directorio de la Confederación de Indígenas del Oriente Boliviano (Cidob) no tiene equipos ni para redactar una carta porque el ex titular de la entidad Adolfo Chávez se llevó todo, incluso dejó a la entidad sin vehículos.
La denuncia corresponde al dirigente Néstor Villca de la Coordinadora de Pueblos Étnicos de Santa Cruz (CPESC), una de las regionales de la organización social, a propósito de la violenta toma de la Cidob por Chávez y sus allegados el fin de semana.
“Hemos retomado las oficinas, tenemos infraestructura, pero no tenemos ni secretaria ni una computadora para hacer una carta. Como regionales se ha decidido ir por la vía legal, tarde o temprano le caerá (a Chávez) la ley”, dijo Villca.
El dirigente además denunció que Chávez enajenó dos vehículos de la entidad, supuestamente para apoyar la llamada Novena Marcha, sin consultar a las bases.
“No han dejado ni una bicicleta, a las otras tres movilidades les da uso personal, cuando se han conseguido a nombre de la organización”, dijo.
El lunes, la Comisión Nacional de la Cidob, presidida por Melva Hurtado, expulsó de la organización social a Chávez y los también ex dirigentes Pedro Nuni, Lázaro Tacoó, Celso Padilla, Fernando Vargas y Justa Cabrera por las agresiones físicas y saqueo a la entidad en la madrugada del domingo.
Ese mismo día, la nueva Cidob, presidida por Melva Hurtado, con apoyo policial retomó las oficinas donde sesionaba la Comisión Nacional. El 10 de julio, la Gran Asamblea Nacional de Pueblos Indígenas (Ganpi) destituyó a Chávez por incumplimiento de estatutos e irregularidades en su gestión.
Los citados ex dirigentes lideraron las dos últimas marchas contra la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos y la actual consulta en el Tipnis.
“Talvez seguirá siendo presidente de los maleantes que golpean a niños, mujeres y dirigentes”, afirmó Villca en referencia a la instalación de carpas con leyendas de “Adolfo Chávez, presidente de la Cidob” en la plaza 24 de Septiembre.
En ese contexto —dijo que ese tipo de acciones ya no tiene relevancia para las diez de las doce regionales de la Cidob, que ya trabajan en proyectos de fortalecimiento y la reestructuración institucional.
El presidente de la Central de Pueblos Indígenas del Beni (CPIB), Pedro Vare, denunció que fue torturado por más de seis horas en el cepo (instrumento para sujetar y retener) donde le chicotearon y golpearon.
La presidenta de la entidad Melva Hurtado denunció que la Cidob fue atacada por unas 500 personas entre ellas pandilleros y ebrios.
Organización social en proceso de recomposición
La analista política Helena Argirakis considera que la Cidob pasa por el tercer momento de inflexión tras la crisis provocada por Adolfo Chávez.
En su análisis, la primera inflexión fue la llamada Octava Marcha de 2011 contra la carretera en el Tipnis, que por el apoyo de la ciudadanía fue positiva.
El segundo momento fue la relación del I Encuentro Plurinacional para Profundizar el Cambio realizado entre diciembre y enero, lo que significó la descomposición del movimiento indígena de tierras bajas.
Para Argirakis, el tercer momento de inflexión es la actual recomposición de la Cidob y del movimiento indígena de tierras bajas, tras la profunda crisis que provocó el problema del Tipnis de la mano de Adolfo Chávez.
