 |
Especial
“No hay decreto de ocho horas, se ha suspendido”, subrayó el Vicepresidente al indicar que no hay motivo para que se mantenga el conflicto. "Vuelvan a trabajar a sus 6 horas, hagánlo ahorita", dijo.
LA PAZ - Cambio
El vicepresidente Álvaro García Linera convocó ayer al pueblo boliviano a movilizarse en defensa del sistema de salud público porque no se puede seguir tolerando el abuso médico que desde el 28 de marzo paralizó actividades en rechazo al Decreto Supremo 1126 que dispone la jornada laboral de 8 horas y que está suspendido.
García Linera, al reconocer que el Gobierno ha cedido, reiteró, en la conferencia de prensa que ofreció en su despacho, que los dirigentes del sector médico mantienen la medida, pese a que el presidente Evo Morales decidió el viernes, a pedido de las organizaciones sociales, suspender la aplicación del decreto, por lo que sigue vigente el horario de las seis horas.
“De continuar el paro, toca a todos los sectores sociales del país movilizarse contra una huelga caprichosa, abusiva, política y criminal”, apuntó.
Al ser consultado sobre por qué no se abroga el Decreto 1126, como demandan los médicos, el Vicepresidente respondió: “No hay decreto, se suspendió hasta que se realice la Cumbre Social, que determinará si trabajan 2, 6, 8 horas. Es lo correcto".
Justicia y privilegios
El Vicepresidente recordó que la propuesta de la Cumbre Social era hacer justicia, que las personas que reciben un salario de ocho horas trabajen ocho horas, pero también acabar con los privilegios. De esa manera se acabó con el privilegio de los terratenientes que acaparaban 10 mil, 20 mil, 30 mil, 50 mil, 100 mil, hasta 200 mil hectáreas, “recuperando tierras para el Estado y distribuyéndola a los pueblos indígena originario campesinos”.
“Hemos acabado con el privilegio de los políticos, que era volverse millonario; ahora ser político es servicio, sacrificio”, aseveró.
García Linera reconoció que algunos médicos, enfermeras, trabajadores en salud, trabajan más de las ocho horas, a quienes “Bolivia entera les agradece”. Pero si todos trabajaran ocho horas pueden atender más pacientes. Asimismo, indicó que “los estudiantes van a la universidad pública y no pagan, el pueblo es el que paga y merece que devuelvan ese sacrificio”.
Descuentos
El Vicepresidente también calificó como un abuso una carta que llegó al Ministerio de la Presidencia, donde la Comisión Nacional de Salud solicita la devolución de los descuentos realizados durante las medidas de presión.
"Durante un mes crucificaron al pueblo boliviano, no les importó el dolor de la familia boliviana y ahora dicen 'páguenme'. ¿Hay que pagar al que no trabaja, al que no ayudó a Bolivia, al que se dedicó a romper vidrios? Esto es injusto, injustificable (...), los ingresos no caen del cielo, son fruto del trabajo (...), ¿a los que no operaron hay que pagarles? No es correcto. Los culpables son los dirigentes", añadió.
“Caprichosa, abusiva, criminal y política”
La huelga en el sector salud, que se sostiene desde hace más de un mes, es “caprichosa, abusiva, criminal y política”, dijo el vicepresidente García Linera.
“Es caprichosa porque no hay el decreto, se ha suspendido, no se aplican las ocho horas, vuelven a las seis horas (...) No se puede ser indolente con la salud, que jueguen con otras cosas, pero no con la salud”, censuró.
Es abusiva porque se maltrata al ciudadano, cuántas personas están en riesgo de morir, “no quieren trabajar para la salud de los bolivianos” y paradójicamente piden que se les pague. “Los culpables son los dirigentes”.
La salud es un servicio, como la luz, el agua, y es criminal dejar sin ese servicio a la población, hay denuncias de niños que murieron por esta causa, el Ministerio Público investiga, sostuvo. Es política porque detrás del conflicto están dirigentes médicos del MNR y de otros partidos, agregó.
