martes, 20 de marzo de 2012

La lucha contra las drogas en Bolivia

http://www.cambio.bo/editorial/20120320/la_lucha_contra_las_drogas_en_bolivia_66985.htm

Editorial 

Pese a que Estados Unidos y su Departamento de Estado consideran que Bolivia y Venezuela no hicieron lo suficiente contra las drogas, los resultados puntuales demuestran lo contrario.

Pese a que Estados Unidos y su Departamento de Estado consideran que Bolivia y Venezuela no hicieron lo suficiente contra las drogas, los resultados puntuales demuestran lo contrario.

El ministro de Gobierno, Carlos Romero, ha expresado que no se puede calificar como infructuosa la lucha contra las drogas en Bolivia cuando el mismo informe del Departamento de Estado de Estados Unidos reconoce los avances logrados en la erradicación de los cultivos de hoja de coca, en la interceptación de cargamentos de cocaína y la detención de personas involucradas con ese delito.

En ese marco, inferir que la lucha contra el narcotráfico en Bolivia es un “fracaso demostrable” es una opinión fácilmente rebatible con la fuerza de los hechos, mucho más si el país ha emprendido esas tareas con recursos y esfuerzos propios.

No es casual que el año pasado Bolivia haya batido los récords de erradicación de los cultivos de coca hasta sobrepasar las 10.500 hectáreas, más del doble de lo que obliga la ley.

Por ese motivo, la posición de Estados Unidos no pasa de ser sesgada, porque solamente busca desprestigiar a una nación que sí se esfuerza para erradicar este delito.

Talvez sería mejor que, en lugar de criticar lo que hacen o no los países en estas tareas, será importante analizar el papel que cumplen Estados Unidos y el mundo industrializado para reducir la demanda cada vez más creciente de cocaína en sus mercados.

El presidente Evo Morales ha llamado en forma permanente a Estados Unidos y a otras naciones demandantes de drogas que cumplan su responsabilidad en la lucha contra el narcotráfico, para que no solamente asuman el papel de “fiscalizadores” sin mirar los problemas que afectan a sus mercados.

Por ese motivo, todo muestra que las críticas sin sustento provenientes del norte buscan abrir el paraguas antes de que la lluvia de las evidencias caiga encima de ellos por omisión en la lucha contra el narcotráfico en el interior de su propio país.

De esa manera, el informe presentado por el Departamento de Estado de Estados Unidos peca de contradictorio, toda vez que incluye los logros de Bolivia en el combate a la droga, pero al mismo tiempo dice que fue un fracaso. ¿En qué quedamos?

El ministro de Gobierno subrayó que en el informe sobre Bolivia se destacan los avances de los últimos años en el combate al narcotráfico, tanto en lo referido a la erradicación de los cultivos excedentarios como en los resultados de los operativos de interdicción para la incautación de las drogas, precursores, detención de personas y otros, por lo que las opiniones en contrario no pasan de ser simples comentarios sin bases reales.

Es importante recalcar que la reducción de los cultivos excedentarios de coca se produce en forma concertada con los sindicatos de productores de la hoja, tanto en la zona del Chapare, en Cochabamba, como en los Yungas, de La Paz.

En el pasado esas tareas se realizaban con la utilización de contingentes de las Fuerzas Armadas y de la Policía, con un saldo de varios muertos y heridos.

Mientras que ahora son los propios sindicatos quienes ejercen una labor de fiscalización para evitar que la coca que se produce sea desviada a otros fines que no sean el uso tradicional y milenario.