
Cuadros
explicó que el nuevo equipo será instalado para mejorar, en un
principio, la confiabilidad operativa de la Unidad de Crudo de este
complejo y, posteriormente, coadyuvar a la ampliación de su capacidad
para procesar mayores volúmenes de combustibles líquidos para el mercado
interno.
“Está
determinado que el nuevo horno se termine de construir en agosto, vamos
a realizar un paro programado de planta, a mediados de septiembre y, en
este lapso breve se ejecutarán los últimos trabajos de interconexión y
puesta en marcha de este importante equipo”, indicó Cuadros.
El
nuevo Horno de Destilación 1-H-1001A de 32.000 BPD es del tipo
cilíndrico vertical de alta eficiencia térmica y dispone de sistemas
modernos de control y seguridad. Esta unidad se instala en la UDC
(Unidad de Crudo) para reemplazar el horno existente que trabaja por más
de 30 años en forma continua, razón por la que se amerita su cambio
para dar mayor confiabilidad operativa a esta Unidad.
El
nuevo equipo servirá de base para el proyecto de ampliación de la
Unidad de Crudo actual a una nueva capacidad de diseño de 32.000 BPD,
para lo cual YPFB Refinación ya inició el proceso de licitación para el
proyecto.
Un
convoy de ocho camiones tráiler trasladó el nuevo horno de
aproximadamente 300 toneladas, desde Buenos Aires, Argentina hasta la
refinería de Cochabamba.
“Sólo
falta algunos equipos pequeños de conexión, de control electrónico y
son piezas mínimas, pero lo grande ya está en Bolivia. El horno es de
una estructura considerable, la punta de la chimenea alcanza hasta casi
47 metros de altura y fue construido en Buenos Aires por una empresa
argentina”, explicó.
La
adquisición de un nuevo horno para la refinería Gualberto Villarroel se
convierte en un proyecto estratégico para YPFB Corporación que
aumentará la capacidad de refinamiento de hidrocarburos líquidos en el
país.
Con
esta ampliación, la Refinería Gualberto Villarroel seguirá procesando
petróleo crudo liviano de 60 a 61 grados API(American Petroleum
Institute) para obtener carburantes como gasolina especial, gasolina de
aviación, kerosene, jet fuel y diesel oil, además de aceites lubricantes
terminados automotrices e industriales como también asfalto.
La
refinería Gualberto Villarroel de Cochabamba es la más grande del país y
procesa actualmente 25.300 BPD de crudo y es la única en la cual se
elaboran aceites bases y aceites lubricantes terminados. Está en
operación desde el año 1978 y las inversiones en la compra, montaje de
equipos críticos como este nuevo horno permiten la confiabilidad
operativa de las unidades, como también la ampliación de capacidad.
Cuadros
también manifestó que en la Refinería de Cochabamba se implementa el
Proyecto de Adecuación de otra Unidad de Crudo de 12.500 BPD, la cual
al momento no se encuentra en operación. Este proyecto consiste en la
adecuación y modernización tanto del proceso como de los sistemas de
seguridad y control donde se implementará tecnología de punta para esta
nueva planta que entrará en operaciones a fines del año 2013. Con estos
dos proyectos de ampliaciones en la Refinería Gualberto Villarroel de
Cochabamba se incrementará su capacidad de refinación en un 69%
adicional a la actualmente existente.
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YPFB Corporación