viernes, 18 de mayo de 2012

POLICÍAS heridos: Universitarios tiraron explosivos para matar

http://www.cambio.bo/seguridad/20120518/policias_heridos:_universitarios_tiraron_explosivos_para_matar_71232.htm

Seguridad 

Dos uniformados cuentan cómo fueron heridos por artefactos explosivos  caseros fabricados por estudiantes de Medicina.

LA PAZ - Cambio


Las violentas manifestaciones de universitarios de Medicina dejaron policías heridos que aún no se recuperan, por la gravedad de las lesiones producidas por explosivos.

El policía Jhonny Calla Quispe, dependiente del Distrito Policial 5 de la zona Huayna Potosí de El Alto, llegó a la Plaza del Estudiante, en el centro paceño, para reforzar la seguridad del Ministerio de Salud.

En el lugar, Calla fue ubicado al frente de la línea de seguridad para resguardar el inmueble de las agresiones de los universitarios.

“Médicos y estudiantes vinieron agresivamente lanzándonos piedras y palos, canicas con flechas y otro tipo de explosivos que nos lanzaron”, explicó el uniformado que hoy se encuentra herido e internado en la Clínica Policial Virgen de Copacabana.

Fue uno de los explosivos, explica Calla, que tenía filosas láminas de latas a manera de esquirlas que saltaron a la humanidad de los policías el momento en que el artefacto explotó.

Fue una de esas hojas afiladas que ingresó por la bota de combate reforzada con doble cuero hasta perforar el pie del policía que cayó herido.

“Una de las lonjas de lata de alcohol me llegó a la pierna izquierda dándome un golpe muy fuerte que me derribó al piso, y posteriormente fui evacuado por mis camaradas a esta clínica”, relató el policía.

En el centro médico fue sometido a una limpieza quirúrgica para retirarle el pedazo de lata del tobillo izquierdo, su bota también demuestra otras esquirlas, señal de la agresividad de los manifestantes.

Junto a Calla, el capitán Alem Acosta resguardaba ese día el Ministerio de Salud. El efectivo policial también fue impactado por un artefacto explosivo a la altura de la canilla izquierda.

La explosión le abrió el pantalón y la piel, dejándole un hueco profundo. El golpe lo derribó y el dolor no lo dejó levantarse.

“Empezaron a lanzar elementos explosivos de fabricación casera, lamentablemente uno de ellos llegó a mi pierna y explotó provocándome una herida de 10 centímetros aproximadamente”, señaló Acosta.

El oficial explicó que los manifestantes doblaron petardos colocando una hojalata al medio para fabricar una granada casera. Al hacer explosión la hojalata fragmentada era lanzada a gran velocidad y llegaba a lacerar la humanidad de quienes ahora son víctimas.  

Ambos uniformados tienen entre 10 a 15 días de impedimento y todavía se requiere hacer exámenes complementarios para determinar el daño en tendones y nervios.

Para Calla, la forma de preparar explosivos y las bazucas caseras son una novedad y una muestra de agresividad extrema.

La peligrosidad de los explosivos hace que cualquier esquirla se clave en los cuerpos, provocando lesiones graves. Acosta señaló que si la esquirla que afectó a su camarada hubiera llegado a alguna vena, como la aorta, hubiera logrado matar al policía por una hemorragia severa. “Nos tiraron a matar”, aseveró el uniformado.

Se colectaron explosivos caseros

El viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez, denunció el miércoles el uso de bazucas caseras para lanzar esquirlas (fragmentos), que pueden incrustarse en el cuerpo de las personas, mediante el uso de petardos de tres y 10 tiros.

Como prueba de ello expuso ante los periodistas los explosivos caseros colectados ese día durante las movilizaciones, los cuales causaron heridas en periodistas y policías.

El comandante de la Unidad de Bomberos Antofagasta, coronel Juan Carlos Flores, explicó la adulteración de los petardos, que en su funcionamiento normalmente adquieren velocidades de 500 metros por segundo.

“(Los petardos) están siendo alterados en su estructura y nos encontramos frente a un artefacto que funciona con pólvora negra capaz de expulsar los elementos introducidos en los juegos pirotécnicos”, detalló.

Agregó que entre los elementos introducidos hay láminas de hojalata, que con la detonación del petardo son expulsadas con fuerza y se convierten en esquirlas que llegan a lesionar la humanidad de las personas. “No solamente (corren peligro) los funcionarios policiales, sino también los transeúntes que se encuentren circulando por el lugar”, añadió.