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El presidente de Bolivia, Evo Morales, manifestó este domingo que se siente convencido que la Organización de Naciones Unidas (ONU) despenalizará la hoja de coca. Reiteró que la planta "no hace daño a la salud humana".
"Estoy convencido que el próximo año (2012) vamos ganar la batalla internacional para hacer reconocer el pijcheo y acullico como uso tradicional de los pueblos andinos y de Latinoamérica", vaticinó el mandatario boliviano, quien se encuentra en el cerro Huanya Picchu, Perú.
Morales aseguró que "vamos a ganar el reconocimiento al pijcheo de la hoja de coca", que "no hace daño a la salud", como se demostró en la reunión con la misión de alto nivel de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
El dignatario, quien espera que la hoja de coca sea reconocida internacionalmente como ocurrió con la quinua, expresó que "estos son pasos importantes que damos y hacemos historia".
Comentó que "antes la quinua era vista como alimento del indio, despreciando al indígena y al campesino, pero ahora es reconocido por la comunidad internacional luego de mucho tiempo".
La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés) elevó a consideración de la Asamblea General de la ONU la Declaración del 2013 como Año Internacional de la Quinua.
El jefe de Estado de Bolivia destacó que la hoja tiene "valores nutritivos y medicinales". La coca en su estado natural "no es cocaína", explicó Morales, tras rehazar la penalización de la planta.
La Convención sobre Estupefacientes de 1961 estableció un plazo de 25 años para que los países firmantes abolieran el mascado de hojas de coca.
Bolivia adhirió a la declaración en 1976, pero logró que en 1988 se aceptara esta práctica.
El país andino es el tercer productor mundial de coca después de Perú y Colombia, según datos de la ONU.
Asimismo, el organismo multiestatal ha señalado que Bolivia posee 31 mil hectáreas de cocales.
teleSUR-ABI-AFP/kg-PR
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