jueves, 12 de marzo de 2015

Gobierno potencia el proceso de la sindicalización obrera

El vicepresidente Álvaro García Linera presentó su obra "La condición obrera en Bolivia. Siglo XX".
 
Crédito: Foto: Carlos Barrios/ Cambio

El vicepresidente Álvaro García Linera afirmó anoche que el gobierno del presidente Evo Morales fortalece el proceso de sindicalización de los obreros en Bolivia con más de siete decretos supremos.

La afirmación fue realizada en oportunidad de la presentación de su obra denominada “La condición obrera en Bolivia. Siglo XX” en un acto realizado en el auditorio del Banco Central de Bolivia y que compila tres investigaciones que encaminó cuando era docente de la carrera de Sociología, en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), entre 1999 y 2004.

Sin precisar los decretos aprobados, señaló que el fortalecimiento del proceso de sindicalización se sustenta en uno de los cuatro elementos que apuntan a la nueva clase obrera en tiempos Plurinacionales.

“Hemos sacado más de siete decretos que apuntan a potenciar el proceso de sindicalización de los obreros en Bolivia, además que existe un proceso nuevo de sindicalización. Hay un acelerado proceso de sindicalización no solo de las empresas estatales sino de las empresas privadas”, remarcó el segundo mandatario.

Sin precisar los más de siete decretos supremos, reconoció que la falta de protagonismo durante el periodo 2000 y 2005 en la clase obrera responde a que ésta se encuentra en un periodo de gestación y no descartó con editar una nueva obra sobre la nueva clase obrera en la época Plurinacional.

Derechos laboralesLa autoridad recordó que en los años 80 hasta 2000 estaba vigente el neoliberalismo, “había un régimen social que había desconocido los derechos laborales, había un régimen político que había destruido el sindicalismo, que colocó a los partidos políticos como únicos intermediarios y había una estructura cultural de ideas fuerza que legitimaban y garantizaban esa estructura de expropiación, privatización de nuestros recursos y de nuestro bienestar”, añadió.

Algunos lo llamaron el “pensamiento Ildis” que, entre otras instituciones, se dedicaban a propiciar investigaciones  y generar debates intelectuales de donde emergían las ideas fuerza que llegaban a los medios de comunicación, a las universidades y a los barrios.

“Estas ideas fuerza eran que el Estado era un mal administrador e ineficiente, por lo que se debía privatizar; había que globalizarse para no ser aplastados” y se pretendía que se abandone el horizonte nacional interno“, sostuvo García Linera.