Los principales
productos que se cultivan en el país son la soya, la caña de azúcar, la
papa y el maíz en grano. Santa Cruz y Cochabamba son las regiones que
concentran la producción de esos alimentos, según el Atlas de
potencialidades productivas de los municipios de Bolivia.
El documento fue presentado esta semana por el Ministerio de Desarrollo
Productivo y tiene información productiva, económica, cultural y social
de todos los municipios y departamentos del país para concretar la
aspiración del desarrollo local, según sus características geográficas.
El director general de la Unidad de Análisis Productivo (Udapro),
Ariel Zabala, dijo a La Razón que la caña de azúcar es el producto que
más se siembra en Bolivia, sobre todo en Santa Cruz. En 2014, la
producción de caña de azúcar llegó a 8,17 millones de toneladas métricas
(TM) y la superficie cultivada a 156.065 hectáreas (ha). El gerente
general de la Corporación Unagro, Marcelo Fraija, explicó que si bien la
caña de azúcar se cultiva más, del 100% de la plantación solo el 10% es
azúcar. Indicó que de una TM del insumo salen 110 kilos de azúcar.
El segundo alimento con mayores cultivos es la soya por la demanda
internacional. La producción en 2014 llegó a 2,99 millones de TM en un
área sembrada de 1,2 millones de ha. “El mapa señala que en Santa Cruz
hay un fuerte componente en la soya que se usa para hacer aceite,
alimento balanceado que se va al mercado interno y externo”, apuntó
Zabala.
Demanda
El
tercer producto más cultivado es la papa y la mayor parte de la
producción está en Cochabamba.
En 2014 se produjo 1,08 millones del
tubérculo y la superficie sembrada fue de 190.209 ha. La región valluna
se caracteriza por producir tubérculos, hortalizas y frutas.
El maíz en grano es el cuarto producto que más se siembra. Su
producción alcanza a 1,03 millones y el área de cultivo llega a 334.708
ha.
Ante esta situación,
Zabala indicó que Bolivia produce más cereales, productos
agroindustriales y tubérculos. Empero, resaltó que “Bolivia es un país
diverso” que produce alimentos que no hay en otras naciones de América
Latina. Explicó que la producción de estos alimentos que no son muy
conocidos depende de la capacidad y la calidad de la tierra.
Precisó que el atlas que contiene esta información fue elaborado por un
equipo de siete profesionales durante diez meses, quienes actualizaron
las bases de datos económicos, geográficos, productivos, climáticos y
sociales con base en la primera versión del Atlas de potencialidades
productivas de 2009 y en el Atlas del Ministerio de Desarrollo Rural y
Tierras de 2011.
La
actualización significó un reto técnico —explicó— por la reducción de la
escala a un ámbito municipal y la inclusión del aspecto productivo con
el cálculo de las unidades económicas.
“El mapa de potencialidades productivas te da información de base para
luego generar un diagnóstico por complejo productivo e identificar qué
cuellos de botella tienen esos complejos para que el Estado pueda
intervenir con políticas”, aseguró.
El documento contiene datos de la población de los municipios y
departamentos, sus características climatológicas, datos
socioculturales, económicos, créditos, sus principales cultivos, sus
potencialidades y otros.
Cualidad de producción
El director de Udapro, Ariel Zabala, afirmó que una de las ventajas que
tiene la mayor parte de los alimentos de Bolivia respecto a otras
naciones de América Latina es que son naturales y orgánicos.
Agregó
además que la soya y el azúcar se producen más por la demanda que hay en
el exterior.