Política
Un ex dirigente indígena del Tipnis denunció que una ONG le planteó dirigir la marcha del año 2011, sólo para afectar, desde adentro, la gestión de Evo Morales.
LA PAZ - Cambio
El ex asambleísta indígena Inocencio Yubanore denunció en el programa Estudio 7 de Bolivia TV que algunas oenegés intentan dañar al Gobierno “desde adentro”.
El ex dirigente señaló que a él le ofrecieron recursos para encabezar la marcha por el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), del año pasado.
“A mí, un representante de una ONG, el año pasado, me habló para que yo lidere la marcha de agosto del año pasado, con el único objetivo de dañar al Gobierno, que tiene una armadura que nada le hace daño por fuera, y más bien que hay que hacerle daño por dentro, eso fue textual lo que me dijo”, aseveró
Yubanore lamentó la posición de algunos dirigentes que se prestaron y se prestan a esas ofertas de las ONG, con la única finalidad de dañar la imagen del Gobierno, con el pretexto de defender el Tipnis y oponerse a la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos. La denuncia se da en momentos en que la Confederación de Indígenas del Oriente Boliviano (Cidob) confirmó la novena marcha para el 25 de abril desde el Beni. Es más, el vicepresidente Álvaro García Linera, el lunes, denunció que detrás de las movilizaciones indígenas está la Embajada de Estados Unidos, a través de las ONG.
Hace dos semanas, el mismo presidente Evo Morales amenazó con echar de Bolivia a la Embajada de EEUU por seguir en sus afanes de injerencia política.
Depredación
El dirigente Yubanore además mostró folletos de la depredación de recursos naturales en el Tipnis, como denunció el Gobierno anteriormente. “Hay maquinaria pesada, incluso hay una fuerte depredación de recursos naturales a través del turismo, hay hoteles en el lado de la zona del núcleo, donde utilizan a los hermanos chimanes para hacer turismo”, aseveró el ex legislador.
Rendición de cuentas
Según una nota de prensa del Ministerio de Comunicación, Yubanore también denunció que algunos dirigentes del Tipnis no rindieron cuentas sobre el uso de recursos recibidos de la Gobernación del Beni durante la gestión de Ernesto Suárez Sattori, para obras en las comunidades campesinas.
Según el ex dirigente, la Gobernación destinó, entre 2006 y 2010, un total de 23 millones de bolivianos para emprendimientos en el Tipnis. Muchos dirigentes que recibieron dineros, en representación de sus comunidades, ahora tienen pliegos de cargo por 500.000 y 200.000 bolivianos. Por eso —apuntó— en la marcha del Tipnis de 2011, estos dirigentes “no podían tapar el sol con un dedo: tenían vinculaciones con los partidos de derecha y con empresarios cruceños”.
Iglesia aboga por la paz
La Iglesia Católica en Santa Cruz, a través del arzobispo Sergio Gualberti, pidió ayer a los dirigentes de la Confederación de Indígenas del Oriente Boliviano (Cidob) que la marcha contra la consulta en el Tipnis, anunciada para el 25 de abril, sea pacífica y en el marco de la ley.
“Que se movilicen en paz, y, como en la Iglesia siempre hemos dicho, a estos hermanos que están en camino nunca se les puede negar la solidaridad y el apoyo humano. Tenemos que recalcarles, en este sentido, que cuiden de manera especial el tema de la paz”
El representante de la Iglesia Católica dijo que los hechos de Chaparina (represión policial a los marchistas del Tipnis), del 25 de septiembre de 2011, dejan una enseñanza a todos.
APG plantea reestructurar la Cidob
El pueblo guaraní, que resolvió no participar en la novena marcha de la Confederación de Indígenas del Oriente Boliviano (Cidob), planteó, asimismo, la reestructuración de esta organización.
El presidente de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG), Faustino Flores, según una nota de prensa del Ministerio de Comunicación, formuló la propuesta dirigida a reencaminar la Cidob mediante la autoconvocatoria de los 32 pueblos que la conforman, a fin de rearticular la matriz de los indígenas bolivianos.
El cuestionamiento de la APG (una de las fundadoras de la Cidob) es principalmente a su presidente, Adolfo Chávez, quien habría suscrito el 25 de enero un acuerdo de carácter político con el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas Aguilera.